martes, 9 de marzo de 2010

JUAN CARLOS I ¡¡REY DE “TODOS” LOS ESPAÑOLES!!

El otro día un amigo mío se preguntaba: ¿Rey de todos?.... ¿Cómo que de todos? Entonces ¿Qué pasa con estos? ¿Qué me dices de estos miles y miles de españoles que se manifiestan a favor de la vida en la calles de las principales capitales de España y de centenares de pueblos a pesar de las inclemencias del tiempo?

No es Rey de estos que vemos en las cadenas televisivas, fotografías en los diarios y en multitud de videos del domingo día 7 de Marzo, clamando a favor de la vida. ¡¡No de estos no es su Rey!! Porque estos y estas, jóvenes y mayores, niños y niñas no están de acuerdo con este Monarca nuestro, que se confiesa católico, porque acaba de firmar lo siguiente:

"Juan Carlos I Rey de España a todos los que la presente vieren y entendieren. Sabed: Que las Cortes Generales han aprobado y Yo vengo en sancionar la siguiente ley orgánica... Por tanto, Mando a todos los españoles, particulares y autoridades, que guarden y hagan guardar esta ley orgánica. Madrid, 3 de marzo de 2010"

Mi amigo repetía el texto haciendo hincapié en algunas palabras…..

"Juan Carlos I Rey de España a todos los que la presente vieren y entendieren (si que lo veo y lo leo, pero….¡¡no lo entiendo!!) Sabed: Que las Cortes Generales han aprobado y Yo vengo en sancionar la siguiente ley orgánica... Por tanto, Mando a todos los españoles, (No dice la monarquía, ni la casa real, sino que habla en primera persona: “Mando a todos los españoles”, y yo me pregunto ¿por qué no manda a los que apoyan esta criminal ley, -solo 6 más que el 50%- o sea la mitad de los españoles -132 votos a favor, 126 en contra y una abstención-que RESPETEN LA VIDA?), particulares y autoridades, que guarden y hagan guardar (Me suena a “precepto” ¿tanto poder tiene nuestro Rey? –para que luego digan algunos que es una “figura decorativa”) esta ley orgánica. Madrid, 3 de marzo de 2010"

Yo trataba de calmar a mi enfurecido amigo, pues a cada momento se iba acalorando más y más con este asunto, y no es por ser católico convencido y monárquico que lo es, (por su entorno familiar) -aunque tiene grandes lagunas-, sino porque le exaspera ver cuántas injusticias y atropellos a la Ley Natural se están consintiendo en este país socialista.

Ante aquello que dice “Constitucionalmente, un proyecto pasa a tener carácter vinculante y rango de ley exclusivamente por la firma del Rey”, recuerdo yo lo que dijo Lope de Vega: “Todo lo que manda el Rey que va contra lo que Dios manda, ni tiene rango de ley, NI ES REY QUIEN ASI DESMANDA”

Una de estas lagunas de mi amigo se le presenta cuando observando que la Iglesia está rotundamente en contra del aborto como un grave pecado, cuando critica y sale al frente en todas las ocasiones aunque desgraciadamente nada puede hacer ante el poder político. Solo ostenta la potestad de excomulgar a los que practican o apoyan estos delitos contra la Ley moral. Y sin embargo dice por boca del secretario general de la Conferencia Episcopal JUAN ANTONIO MARTÍNEZ CAMINO que: El Rey, conforme al criterio episcopal, no tendrá problema moral alguno al comulgar.

Ahora resulta que ¿existen varios criterios episcopales?, pues… ¡¡me lo explique!! Jesús solo conocía dos criterios, los que estaban en posesión de la verdad y los que no, los que se sentarían a la derecha del Padre y los que lo harían a la izquierda. Sin favoritismos, sin distinciones, con un solo criterio, todos seremos juzgados por el mismo rasero aunque con la particularidad suprema de poder ser siempre perdonados (pero esto es otro tema).

Tanto mi amigo como yo, nos preguntamos: ¿seguirá todavía en vigor en el “criterio episcopal” LA BULA? (era un privilegio para los que la conseguían, previo pago de su importe acorde a las posibilidades de cada cual y que se decía estaba destinado a limosnas, consiguiendo además INDULGENCIAS).

Así es que el Rey, como tal, es de suponer que está en posesión de la inmunidad moral, pero aunque así fuere, el Rey también es un ser humano sobre quien deberían recaer todos los cargos de conciencia que se nos exigen a los demás.

Me comentaba mi amigo que al sancionar El Rey la ley ya no representa nada para él, que nuestro monarca ya goza de una escasa credibilidad y legitimidad, y la va a perder del todo por no demostrar ser el Rey de todos los españoles, no solo católicos, sino hombres de buena fe, éticos y morales, porque esta desgraciada ley va contra todos esos valores, y si no ve este clamor popular, debería marcharse honrando una institución, la monarquía, por la cual un elevado número de españoles sentimos un considerable aprecio y respeto.

¡¡Calla, calla por favor le dije a mi amigo!! No te enfurezcas, no vas a conseguir nada, ¡este país es como es!, mejor dicho es como quieren nuestros gobernantes y el populacho que les vota, que sea, y nosotros nada podemos hacer mientras exista “La disciplina de partido” Cuantos hombres y mujeres poseedores de verdaderos valores morales, pero políticamente contrario a ellos, son tan cobardes de no oponerse a aquello con lo que no comulgan.

En último caso podría haber hecho como Balduino de Bélgica que renunció al trono, justo el tiempo de firmar la ley, el día 6 de noviembre de 1989 el Senado de su país había aprobado una de las leyes más laxas sobre el aborto y el 29 de marzo del siguiente año, la aprobó también la Cámara. Faltaba únicamente la firma de él para que la ley pudiera aplicarse. En un hecho sin precedentes el Rey Balduino, el 30 de marzo de 1990 envió una carta al Primer Ministro de su país explicando las razones de conciencia por las cuales no podía firmar dicha ley. El trono belga estuvo vacante durante 36 horas.