viernes, 7 de septiembre de 2012

PENA DE SUICIDIO


     Nada me repugna mas que ver esta cara, y mas aún ponerla en mi Blog, pero a veces es necesario hacer de tripas corazón para expresar lo que se siente ante determinados hechos.
     Estoy totalmente en contra de la pena de muerte (Creo que nadie tiene potestad para acabar con la vida de otra persona)

     Es incomprensible que se ejecuten actos como el efectuado "presuntamente" por este individuo, y no hay palabras para calificarlo, los que hemos tenido hijos y nietos ahora de edades similares a RUTH Y JOSE, se nos pone un nudo en la garganta y una opresión en el pecho, que nos hace sufrir infinitamente (nunca como lo habrán padecido, "presuntamente" estos niños), y no sabemos, por impotencia emocional describir este sentimiento humano que nos embarga, y del cual carece "presuntamente" este individuo.

     Se esta hablando de una sentencia de 40 años de prisión, (todos sabemos como son actualmente las cárceles, hay quien dice que son hoteles de lujo).

     Veo, oigo y leo comentarios de todo tipo, que si cadena perpetua, que si pena de muerte, que si trabajos forzados, etc. etc.

     ¡¡Yo lo tengo muy claro!! Para este caso, como para otros delitos cometidos por gentes de, "presuntamente" esta calaña, y de tener potestad para ello, yo impondría: "LA PENA DE SUICIDIO".

     Creo que se entiende la idea e intención de la aplicación de esta justicia para estos "presuntos" homicidas (mas grave: parricida, en este caso), pero por si queda alguna duda, trataré de explicarlo con brevedad.

     Este asesino (en el caso de no ser "presunto"), iría inmediatamente a prisión. En la cual no tendría, no solo privilegios, sino comodidades, donde careciera de lo mas elemental para vivir, a excepción de pan y agua, donde se le encomendasen trabajos forzados, donde se le proyectasen constantemente imágenes de los niños, haciéndole ver el daño causado a esos inocentes, a su madre, familiares y a la sociedad en general, donde no tuviera ni la más mínima esperanza de reducción de pena, por muy bien que "fingiera" portase, donde se le impidiera conciliar el sueño noche tras noche, etc. etc. 

     Por último, que tuviera a su alcance utensilios, herramientas y/o armas con las que desesperado de una vida tan indigna, no tuviera otro remedio que desear su PROPIA MUERTE aplicada con las mismas manos que arrebataron "presuntamente" la de esos dos angelitos que fueron para desgracia de ellos: SUS PROPIOS HIJOS.

     Se que esta opinión, está fuera de toda norma cívica, y es totalmente ilegal según nuestras leyes, se que pudiera herir la sensibilidad de muchos delincuentes que están en periodo de inserción, se que no soy quien para juzgar y menos aún dictar sentencia para nadie, pero comprendan mis lectores que ante una noticia como la que nos ocupa, se pierden los estribos y se expresan los sentimientos de ese momento, aunque después haya que pedir disculpas.